Es prácticamente una decisión del Codicen que inmediatamente después de las vacaciones, las clases presenciales en todo el país, con la única excepción del departamento de Treinta y Tres, vuelvan todos los días. Los integrantes del Directorio del organismo están estableciendo un cronograma para que los alumnos vayan a clase diariamente aunque no en forma obligatoria.
Se tiene en cuenta que la decisión de los padres de abstenerse de enviar a sus hijos por temor a los contagios, es un hecho que debe ser tenido en cuenta, pero Primaria, Secundaria y UTU tienen que dar todas las facilidades para que aquellos que así lo prefieren puedan recibir clases de manera diaria.
Las escuelas de tiempo extendido podrían seguir la misma lógica, aunque con grupos rotativos y talleristas en lugar de la maestra de clase.
El único problema está en las escuelas comunes de menos horas donde la maestra debe repartir el tiempo entre la clase presencial y la virtual, dado que aquellos que no van al aula, tendrán el mismo derecho de los que asisten.
En síntesis, aquellas plazas que dejen vacantes los niños que no asisten, pueden ser ocupadas por otros que pueden hacerlo y se está evaluando con el Ministerio de Salud la posibilidad de extender los horarios más allá de las cuatro horas.
En la educación media, donde la asistencia ronda el 50% en UTU y el 75% en Secundaria, la limitación del horario suele cortar el clásico turno lectivo de cuatro horas y cincuenta minutos. Por eso la Anep quiere que se revise el protocolo para luego del receso invernal.
En las instituciones privadas la situación general parece ser diferente porque la asistencia de los alumnos es cercana al 98%.
En cuanto a las escuelas rurales, las que se habían incorporado primero a la presencialidad, están funcionando cinco días a la semana con cinco horas diarias pero el Codicen espera que después de las vacaciones también la actividad sea normal en las escuelas rurales.